Ceylon Tea Trails: Despertar entre plantaciones de té
Imagina despertarte mientras los primeros rayos del Sol se reflejan en el espejo de un gran lago rodeado por una frondosa vegetación y verdes plantaciones de té. Imagina caminar sobre la hierba húmeda en compañía de una banda sonora de silencio y algún pájaro madrugador. Una primera taza de uno de los mejores tés del mundo y el aroma de unos hoppers (tortitas calientes con huevos) recién hechos te devuelven a la realidad y te das cuenta que no es un sueño, que estás en uno de los acogedores bungalows de Ceylon Tea Trails, en Sri Lanka.
Edificados inicialmente entre 1850 y 1925 como vivienda para los capataces de las plantaciones de té de la zona, Ceylon Tea Trails está compuesto por un total de cinco bungalows de estilo colonial británico, situados a 1.400 metros de altura, alrededor del lago Castlereagh y entre las plantaciones de té de las colinas de Bogawantalawa, en la región de Dimbula, en el centro de Sri Lanka. Alojarte en uno de los bungalows de Ceylon Tea Trails es hacerlo en un fragmento de la historia de Sri Lanka.
A principios del siglo XIX, Sri Lanka era conocida por sus plantaciones de café pero en el año 1870 una plaga acabó con todo este negocio. Fue entonces cuando el escocés James Taylor plantó en una zona cercana a Kandy una primera semilla de té que llegó de contrabando desde China. Las buenas condiciones climáticas de esa parte de la isla hicieron que floreciera una productiva industria que, hoy en día, exporta más de 350 millones de kilos de té al mundo.
Las principales plantaciones se encuentran en la región de Dimbula y es ahí donde el viajero puede disfrutar de toda la belleza, los colores y la luz del paisaje de montaña de Sri Lanka. Plantaciones, arbustos, lagos, cascadas y pequeñas poblaciones y templos convierten tu estancia en Ceylon Tea Trails en una experiencia donde disfrutar de la naturaleza, la cultura, la espiritualidad, la comunidad y la gastronomía de ese país.
Los bungalows se encuentran a 4,5 horas de la capital Colombo y a 2,5h de Kandy si viajas por carretera, aunque la mejor opción sin duda es hacerlo en un hidroavión y amerizar directamente en el lago. Cada bungalow consta de entre 4 y 5 habitaciones y suites. Cada una de ellas es única y diferente y llevan el nombre de los capataces de la plantación que vivieron en los bungalows.
Un cuidado interiorismo que fusiona las maderas, mobiliario, camas con dosel y bañeras propias del estilo colonial de principios del siglo XX con las tapicerías, alfombras y estampados de estilo clásico inglés. Además, cada estancia está decorada con cuadros y litografías, libros de historia y antigüedades para admirar al anochecer, al lado de la chimenea, degustando una copa de whisky.
Los cinco bungalows están separados entre 2 y 15 kilómetros el uno del otro, distancia que es posible recorrer a través de fascinantes senderos, a pie o en bicicleta o navegando por el lago en kayak. Durante tu estancia, es obligada una visita a las plantaciones y a la fábrica de té Dunkeld, propiedad, al igual que Ceylon Tea Trails, de la familia Fernando.
En esta fábrica podrás descubrir todos los secretos del té así como las diferentes tipologías y su proceso de plantación, recolección, prensado, secado y envasado. Aquí se recolecta y envasa el famoso té Dilmah, una de las marcas más prestigiosas del mundo. Puedes acabar la visita con una “cata” de té a cargo de Bernard Holsinger, el gerente de la plantación, que te explicará los secretos de esta bebida milenaria y que pondrá la guinda a tu estancia y a una experiencia donde la felicidad también está incluida.
- Visita obligada a Dunkeld Tea Factory para descubrir todos los secretos del té —
- Ver amanecer o atardecer desde la "Infinity Pool" de uno de los bungalows de Ceylon Tea Trails —
- Una de las mejores formas de llegar a Ceylon Tea Trails es amerizando en el lago Castlereagh —
- Un enclave ideal para descubrir uno de los entornos naturales más espectauculares de la isla